A todos nos ha pasado enfrentarnos a tareas realmente aburridas en nuestros trabajos. Muchas veces intentamos evitarlas o delegarlas pero no siempre es posible.

Al hacerlas, las tenemos tan incorporadas, que ni siquiera se nos pasa por la cabeza tratar de encontrar otra forma, y a veces nos topamos con la famosa frase: “Acá eso siempre se hizo así”

¿Tenés identificadas estas tareas en tu trabajo? ¿Has intentado solucionarlas?

Te cuento las mías… (Spoiler: Si te sentís identificado con alguna… al final te cuento cómo las resolví 😉)

1 –  Realizar tareas presenciales básicas de rutina

Sinceramente, esto no parece un problema, ¿No?. Pero imaginate que sos el primero o el último en llegar/irte de una oficina como me pasa a menudo. Siempre hay que revisar el encendido/apagado de todas las luces, aires acondicionados, cafeteras, etc.

No me quiero imaginar empresas con maquinaria o heladeras por ejemplo. En ese caso, hay que revisarlas cada cierto tiempo para verificar que están funcionando o que no hayan quedado abiertas.

En conclusión es super tedioso y muchas veces nos olvidamos de revisar y siempre lo terminamos pagando a fin de mes.

2 – Hacer planillas/informes para auditorías, calcular eficiencias, anotar valores de referencia, etc.

Con esto me refiero a cuando tenemos que anotar muchos valores de parámetros y hacer cuentas para presentar a nuestro jefe o a autoridades. Otro caso es auditar los mismos sensores todos los días a la misma hora para presentarlos en una planilla a fin de mes.

A veces, eso es solo el primer paso, sobre el fin de semana, quincena y/o mes tenés que juntar toda la información, hacer gráficas, revisar que los valores sean correctos y enviarlos. 

Seguro estás pensando lo mismo que yo: ¡Qué aburrido! Pero hay que hacerlo y siempre hay que entregar este tipo de informes.

3 – Estar pendiente de posibles fallas/problemas para solucionarlos rápidamente

No importa en qué rubro trabajes, este problema lo tenés seguro. Ya sea porque trabajás en una fábrica y tenés que estar al tanto por si pasa algo, o si trabajas en un banco y se apagó el aire acondicionado, para que no te lluevan quejas de clientes.

¿Cómo las resolví?

Implementando Internet de las Cosas . Esta tecnología me permitió:

• Monitorear y controlar de forma remota y en tiempo real luces, puertas y equipos de calefacción.
• Generar reportes de forma automática con información relevante para quienes los necesiten.
• Que me lleguen notificaciones de alarmas personalizadas a mi celular cuando hay  alguna falla o problema.

Al fin de cuentas automaticé tareas para no tener que hacerlas de forma manual y pude dedicar mi tiempo para lo que realmente soy bueno.